
Sentirse sola no es nada agradable. Y en algún momento de la vida todas pasamos por eso. Algunas hacemos algo rápidamente para ocuparnos, aunque cometamos errores. Salimos adelante. Otras no tienen la misma suerte.
Hoy escuché sobre chicas que creen en promesas y caen en redes maquiavélicas. Creen en un amor que apareció en un chat, en un señor mayor que les ofrece transformarlas en reinas. Esperan al príncipe azul. Abandonan todo y salen en su búsqueda. Pero sólo encuentran desesperación, maltrato, golpes y prostitución.
Esta es una historia de siempre. Pero sacude cuando notás que puede estar a la vuelta de la esquina. Cuando escuchás la angustia de una madre que trata de seguir los pasos del calvario por el que pasa su hija.
Y me pregunto, otra vez, que busca una chica de 17 años cuando se siente sola. Qué la llevó a pensar en que ese que le arrancará su vida será su protector. Qué pasa en sus casas. Cuáles son sus pensamientos. Por qué los silencios. Seguramente alguien tiene las respuestas. Yo sólo tengo una imagen dolorosa de alguien que no encuentra solución. Y con ella el deseo de que cada caso se resuelva.
1 comentario:
Cuando vi Vidas Robadas, esa novela con Facundo Arana, me parecía que no reflejaban muy bien el problema por el que pasan muchas chicas, pero si la viste te habrás dado cuenta que no existen héroes que las puedan rescartar. Pr ahí si hablamos más del tema con las jovenes aportamos un granito de arena para que esten atentas.
Saludos
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