miércoles, 21 de octubre de 2009

Le contaron que dijo que dice que...

Carina no se sentía muy bien esa mañana. Decidió postergar todo lo planeado y disfrutar de una larga ducha. Antes llamó a su madre. Le hizo un comentario y pidió discreción.
Minutos después... Su madre llamó a su tía. Su tía habló con la abuela. La abuela se lo contó a la vecina. La vecina, al carnicero. El carnicero, a otra clienta. La clienta a su hija. La hija de la clienta a su amiga. La amiga de la hija de la clienta, al marido. El marido de la amiga de la hija de la clienta, al oculista. El oculista a su secretaria.
La secretaria del oculista a la maestra de su hijo. La maestra del hijo de la secretaria se lo dijo a la peluquera. La peluquera lanzó la novedad al proveedor de tinturas. El proveedor de tinturas agarró el celular y llamó a su mujer. La mujer del proveedor de tinturas se lo dijo al veterinario. El veterinario se lo contó al peluquero canino, quien se lo dijo a la dueña del ovejero alemán cuando pasó a buscarlo.
La dueña del ovejero alemán se cruzó con la chica que escribe en la sección sociales del diario y le dio la primicia. La chica de sociales del diario se acordó del comentario cuando fue a la farmacia. Entonces se lo contó a la farmacéutica.
La farmacéutica se lo contó a la cajera de la farmacia. La cajera de la farmacia, al cadete. El cadete, a la señora que había pedido analgésicos para el dolor de muelas. La señora con dolor de muelas no podía ni hablar pero llamó a su hermana para comentarle. La hermana de la señora del dolor de muelas llamó a su esposo, que estaba trabajando en su oficina.
El marido de la hermana de la señora con dolor de muelas llamó a su empleado a su despacho. El empleado golpeó con los nudillos la ventana e ingresó. El jefe lo esperaba con los brazos abiertos. Se le abalanzó dándole varias palmadas casi asesinas al grito de: ¡Felicitaciones hombre. Al fin será papá!
Carina ya había tomado su larga ducha y disfrutaba de un café humeante cuando tomó el teléfono para darle la noticia a su marido.

1 comentario:

fher dijo...

Jajajaja... ¿porqué será que las madres no pueden guardar ese tipo de secretos?

Besos