
Preocupada, envío un mensaje a su casa. Necesitaba saber qué estaba pasando. La mañana siguiente la sorprendió con la llegada de la niña junto a su madre. “¿Por qué has faltado? ¿Has estado enferma?”, le preguntó a su alumna sin obtener respuesta. Sólo la vio bajar su mentón hacia su pecho como si buscara encontrar algo bajo tierra.
“Mire maestra –dijo la madre- Melisa está embarazada. Y yo vengo a pedirle que me mande avisar si no viene a la escuela, porque ahora se fue a vivir con su novio y yo no quiero que deje de estudiar. Quiero que mi hija sea algo en la vida”.
Con tan sólo 13 años, Melisa sabía qué sería. Al menos en un futuro cercano. También lo sabían las dos mujeres que buscaban su mirada. Melisa sería madre. Una niña madre.
1 comentario:
Cada vez hay más casos como este y son muy pocos los qeu se preocupan por ellos.
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