viernes, 12 de junio de 2009

Maru se da el gusto

Siempre he criticado a las mujeres que hablan mal de sus maridos, especialmente en público. Pero tengo que admitir que algunas lo hacen con gracia.
Transformada en una fanática de las delicias culinarias y aprovechando que el control remoto del televisor estaba en mis manos y no en las de mi hijo buscando Discovery Kids, me di un panzada de programas gourmet.
Harta de recetas con ingredientes demasiado refinados, puse a Maru Botana. Y vaya si me divertí. Mientras preparaba unas rabas decía, con su incomparable estilo desenfadado, "a las 11 de la mañana ya estoy agotada. Tuve que bañar a los nenes. La más chiquita quiso ir más tarde a la escuela. Volví a buscarla. Cuando la dejé se descompuso y la tuve que llevar de vuelta a casa, más un montón de problemas en el medio. Todos problemas. Y decidí llamar a mi marido, que como siempre está en el campo y adivinen qué pasó, no me atendió y después me mandó un mensaje de texto enojado ¡Qué pasa! Y bueno, yo sola. Soy sola. No soy Maru Botana, soy Maru "Sola".
Increíblemente lo escrachó ante miles de televidentes. Se dio el gusto. Nos hizo cómplices y partícipes de una revancha salada.

1 comentario:

Anónimo dijo...

que genia, te digo que yo me sentí identificada al cuadrado, ja,ja,ja