sábado, 1 de agosto de 2009

Esa es como mi ex marido

¡Ring, ring, ring!
-Hola...
-¿Qué hacés gordi?
-Nada, pero solo por un rato, ¿viste que al final los fines de semana una no descansa?
-Pensé que te juntabas con tus primas...
-No, prefiero aburrirme en casa.
-¿Che nena no la has visto a fulana?
-No, no me amargues más los mates de la tarde.
-Bueno, por ahí se habían cruzado.
-Mirá flaca, vos tenés que entender una cosa, mis ex amigas son como mi ex marido.
-Bueno, no será para tanto.
-Tenés razón. Ese es peor. Pero trato de no nombrarla. Y no quiero que me la nombren. ¿No se si entendés?
-Sabés que, tal vez no estés tan equivocada.
-Te lo aseguro. Se ponen terribles. Primero te cagan, después se hacen las víctimas. Tratan de acercarse otra vez y si les das una sola posibilidad te vuelven a joder. ¿Y vos para qué la necesitabas?
-Para nada gordi, sólo preguntaba. Por curiosidad.
-¡Ni se te ocurra a vos o ninguna de las otras tratar de juntarnos eh!
-Bueno, basta ya. ¿Qué hacés mañana?
-Me cuelgo al teléfono desde temprano para que el que dice ser el padre de mis hijos se haga cargo un domingo, me traiga lo que me falta de cuota, bla, bla, bla,...
-Bueno amiga, te dejo porque se me queman los frijoles.
-Chau, chau, cuidate, un beso enorme. (Al fin colgó esta pesada)
-(Menos mal que la tengo de amiga)

3 comentarios:

Eliana dijo...

Más claro echale agua. Muchas hacemos lo mismo...

El Tato dijo...

Cuanta falsedad. Por eso los hombres nunca perdemos los amigos.

Anónimo dijo...

Tato: Pero pierden las mujeres.