sábado, 12 de septiembre de 2009

En las mujeres es distinto

Iba por la calle sin pensar en nada, cuando tres niños no mayores de 10 años me sorprendieron con el rebote de una pelota contra la vereda. No sólo lograron sacarme de mi universo, sino que también me llevaron a prestarles atención. Primero en lo externo. Activos y desenvueltos, se movían con agilidad mientras hablaban. “En las mujeres es distinto” decía uno. “No, vas a ver que no”, agregaba otro. El tercero, muy seguro de lo que expresaba, como si predijera un futuro no muy lejano, afirmaba: “Ellas nunca van a pensar cómo nosotros. No van a ir a un partido de fútbol, porque no les interesa y nunca nos van a entender”.

No hay comentarios: